Mañana es el solsticio, el sol entra por la ventana a estas horas de la mañana, de noche hubo niebla y ayer nublao...Estas eran las témporas de verano: el tiempo del miércoles (lluvias torrenciales por la mañana y sol por la tarde) será el de julio, el del viernes (sol pero fresco) será el de agosto, y el de ayer (nubladillo) el de septiembre. Parece según esto que el verano vendrá fresquito, sin calorones, sin alpargatas, y de poca playa. Lo escribo porque así lo puedo comprobar, porque estas cosas nunca hay que creerselas del todo, y la mente científica todo lo quiere comprobar, como Santo Tomás.
Ahora espero a que levante la niebla y el sol termine por hacerse con el día, para salir de casa a pasear a la perra. La pobre, con la pantallona que le pusieron aquel miércoles de lluvias torrenciales tras la operación, en un lugar recóndito de Gijón, con magníficas vistas de los polígonos industriales que ocupan lo que antes era la vega fértil donde mi abuela iba a pasear en barca y comer fruta de las riberas del río. Parece una historia de cuento cuando ahora miras a Aceralia y las cementeras de Aboño. Estas inundaciones intentaron devolver a las vegas su aspecto original, pero ya hay tanto daño hecho que muchas riadas tienen que venir para poder volver a comer fruta en aquella zona llena de camiones y construcciones de metal oxidado, tráfico y humos, polvo y casas abandonadas.
La operación fue bien, aunque el sitio daba algo de miedo y ella lloraba, pero ahora corretea contenta y come bien. Y yo, también estoy bien según me dijeron en el hospital de personas, mis análisis son normales y la cosita que llevo dentro tiene pies diminutos y manitas y se mueve, su corazón late y todo fue muy emocionante. Su presencia me impulsa a hacer cambios de mobiliario y decoración, a tirar lo que sobra y hacer espacios nuevos a prepararme para su llegada con ganas aunque con miedos, cómo no? Todo va a ser tan distinto que asusta. No me dieron foto así que no os la puedo enseñar, pero mide unos 7cm de la cabeza al culo, para que os hagáis una idea, cabe en una manina.
Aqui os dejo, que el sol ya asoma y los bichejos tienen hambre: perra gatos y gatuños, gallinas y pollitos...nosotras ya comimos. Besinos.
Por cierto, aunque parezca lo contrario, al triton lo salvamos en una curiosa excursión por los montes de La Romía.
domingo, 20 de junio de 2010
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1 comentario:
Bueno, veo que la vida sigue su camino, la perrina está bien después de la operación y tú y lo que llevas dentro también. Me alegro que así sea...
P.S. Deberían venir grandes inundaciones para que volviera todo a parecerse a lo que en otro momento fue... y creo que ya sería imposible. Además, ahí está el hombre para volver a llenarlo todo de cosas, de fábricas, de casas y de porquerías por el estilo, sin que quede espacio para que la naturaleza esté un poquito tranquila. Somos imposibles, cada día más.
P.S.1 El tritón es muy guapín y posa muy bien,
P.S.2 ¡Besinos!
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