nada de nada

Tengo un tiempo de nuevo un tanto raro en el que me cuesta escoger el tema, aunque a mí lo que me gusta es escribir por escribir, así de corrido, sin pensar queé voy a decir ni sus consecuencias. Por eso a veces meto esos rollos interminables que sorprendentemente algunas personas leen...ejem, ejem. Estas vacaciones el tema del blog ha sido algo recurrente y algunos miembros de mi familia parecían convenir en que escribo cosas complicadas, o difíciles de leer, o no sé muy bien cómo interpretarlo. Porque yo me siento y escribo cualquier cosa que se me pase por la cabeza, no leo ni he leído nunca filosofía ni política porque siempre me ha parecido un peñazo, a menos que me obligaran en el cole o fuese un libro dedicado a los niños y con letra grande. Hay algunas excepciones, como Hackim Bey, pero ese me encanta porque está como una cabra y todas sus propuestas son divertidas. Por eso se me hace raro cuando me dicen que es filosófico; político desde luego que no y religioso... por Dios! si yo no tengo ninguna certeza que transmitir en ese campo. Yo simplemente me dedico, sobre todo, a preguntarme cosas que me interesan y que no suelen tener respuesta, y si la tienen es una respuesta que por supuesto plantea una nueva pregunta, ý así siempre tienes la sensación de que no avanzas, y cada vez tienes más preguntas. Ese Sócrates...campeón!
Supongo que lo que a algunas personas les puede gustar de leer estas tonterías sea que sus preguntas sean parecidas, o su momento vital, quién sabe. Yo sigo sin saber si existimos, y si existimos, qué somos, cuándo somos, qué es el tiempo y porque fluye sin sentirse, para qué nació la vida y cómo, y cuándo y dónde, etc etc, que así podría seguir hasta el infinito. ¿es el Universo infinito o existe una nada desconocida después? Pero si existe entonces será algo, y qué?. Bueno, ya me dejo de tomaros el pelo.
Que tengais un feliz día-vida-siempre.