Empiezo estos dias mirando el correo, leyendo algunos textos útiles y trabajando ante el ordenador. La costumbre de cinco años es difícil de abandonar, y el hecho de seguir mis propias manías me hace sentir más yo. Así que me he contratado una tarifa mini de internet, que espero me sea suficiente.

Voy observando cómo gestionaré el tiempo, y lo larguísimos que son los días. Ayer a las 4.30h de la tarde ya tenía segada la finquina junto a la escanda y recogida la hierba alrededor de los frutales. Ya había trabajado cuatro horas y media con mi cuerpo y otras dos con el ordenador, había comido y también desyunado. Y aún me quedaba toda la tarde por delante para limpiar la casa, plantar y regar, etc.

Hoy ya tengo mucho avanzado y menos cosas que hacer: regar las zanahorias, limpiar de hierbas los puerros, atar los tomates y echarles un poco de caldo bordelés por si vuelve a llover. Entra el sol por la ventana y oigo a una gallina gritando que ha puesto un huevo. El resto del tiempo lo puedo utilizar para prepararme para mi nuevo trabajo de delineante ecológica, jejje, me gusta ese título...

La foto que os puse ayer es de Babia, de la zona de Arbás, o Arbas, tengo dudas siempre con ese acento. Allí fuimos a coger sacos de tomillo blanco, hipérico, milenrama, orégano....Volvimos acalorados y con el coche lleno de aromas, de un viaje feliz, que culminó en el faeu de arriba de La Romía, con las yeguas de javi entre la niebla...pena de fotos, no hice....

La de hoy es Luisito sobre una asturcona muy noble que accedió a pasearnos del ramal de su dueño, como si fuesemos niños pequeños, pero allá fuimos muy dignos, y así va Luis, orgulloso como un Quijote con escudero y todo. En la fiesta de ACPRA, en el Monte Cayón, donde conseguí noticias de Viriato, qeu sigue de semental por el occidente, pero también donde una mujer me riñó por coger pan para mis amigos, y acabamos marginados con camarero especial....